EN ESTE TIEMPO APRENDÍ
En los tres años que he vivido "sola" he aprendido y recordado tantas cosas que por fin he encontrado hueco e inspiración para plasmarlas y tenerlas siempre a mano por si se me olvidan en algún momento.
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En este tiempo aprendí que nada me sucede sino me corresponde y es para
mi beneficio, eso significa que todo, absolutamente todo, ha sido
perfecto en mi vida.
En este tiempo aprendí que nada fue, ni es,
ni será, un error, salvo mi interpretación de los hechos, porque la vida
siempre está haciéndome un gran favor.
En este tiempo aprendí,
con sufrimiento adicional, que nadie puede salvarme, ni siquiera el
hombre más maravilloso del mundo, porque la salvación procede de mi.
En
este tiempo aprendí que esperar a que alguien me baje la luna es tan
absurdo como esperar a que un gato ladre. “Vamos que me pueden dar las
uvas esperando”.
En este tiempo aprendí que si quiero la luna,
más me vale bajármela yo misma y termino antes, porque aunque me
desenfoque con frecuencia, he comprendido que la felicidad está en mi y
la responsabilidad de mi vida también.
En este tiempo aprendí a
recordar el camino de regreso a casa, mi verdadero hogar, que no está
fuera en ningún lugar concreto, sino en mi interior. Así que mi casa es
“portátil” porque viene conmigo donde quiera que yo vaya.
En este
tiempo aprendí a escuchar más y hablar menos, mucho menos. Tanto que
dejé de necesitar a personas con las que consultar mis asuntos.
En
este tiempo aprendí a confiar en mí, en mi criterio y en mi voz
interior, la cual estaba tan difusa con el ruido externo que a penas
podía escucharla antes.
En este tiempo aprendí a tomar decisiones sin preguntarle a nadie mas que a mi corazón.
En este tiempo aprendí a redescubrirme a mi misma, a la vida y aspectos tan esenciales como el sexo.
En este tiempo aprendí que soy mucho más fuerte, valiente y decidida de lo que jamás hubiera pensado.
En
este tiempo aprendí a disfrutar de mi propia compañía y dormirme
sintiéndome tan en paz y completa que nada ni nadie me faltaba.
En este tiempo aprendí a parar, sin hacer nada más que observar.
En
este tiempo aprendí que tener la agenda llena, hacer muchas cosas y
relacionarme con muchas personas, lejos de aportarme felicidad, me
distraían y hacía más lento mi caminar.
En este tiempo aprendí que puedo vivir perfectamente sin cosas que para mi eran esenciales en otro momento.
En
este tiempo aprendí que cuando te sientes realmente feliz por lo que
eres y no por lo que tienes o haces, los sucedáneos ya ni te alimentan
ni te interesan.
En este tiempo aprendí que no puedo fracasar,
como tampoco tener éxito, solo puedo vivir experiencias perfectas para
mi de las cuales aprender.
En este tiempo aprendí que se puede " despertar " sin sufrir.
En
este tiempo aprendí a dar las gracias cuando suceden cosas que me
encantan y alegrarme mucho más cuando no, porque a Dios gracias, no
todos mis deseos se hacen realidad.
En este tiempo aprendí que no sé nada, mucho menos lo que me conviene a mí, y en absoluto, lo que es mejor para los demás.
En este tiempo aprendí a sentirme cómoda reconociendo, lo poco que en realidad sé.
En este tiempo aprendí que cuando siento que necesito amor, lo que me conviene es AMAR y dejarme de tonterías.
En este tiempo aprendí que el silencio y la soledad son mis grandes aliados.
En este tiempo aprendí que deseo lo mejor para todo el mundo, pero sólo me relaciono con quien me interesa.
En este tiempo aprendí que más me vale comer un mendrugo de pan sola y a gusto, que un manjar acompañada y a disgusto.
En
este tiempo aprendí a ser cada vez más selectiva y coherente con lo que
pienso, siento, digo y hago, además de a dónde voy y con quién me
relaciono.
En este tiempo aprendí que cada uno cumple su papel en esta obra y que no nos debemos nada.
En
este tiempo aprendí que cuando estoy sufriendo es porque estoy creyendo
en un pensamiento que es falso y como suelo decir, "no me estoy
enterando de la película".
En este tiempo aprendí que todo llega y todo pasa porque el mundo aparente está siempre cambiando.
En
este tiempo aprendí que la vida es como una película y que no puedes
juzgarla por una sola escena. Las cosas, nunca son lo que parecen ser.
¡ Aprendí a sentarme tranquilamente en la última butaca y ver el
espectáculo !
En este tiempo aprendí que así como me relaciono conmigo misma, me relaciono con los demás.
En este tiempo aprendí que no me falta nada, más bien me sobran todos los obstáculos que me impiden ver con claridad.
En
este tiempo aprendí que muchas personas pueden ir y venir a lo largo de
esta vida pero una sóla está siempre presente: YO. Por eso mismo, soy
lo mejor que me ha pasado y lo más importante.
En este tiempo aprendí que sólo hay una persona sin la que no puedo vivir en este juego: YO.
En
este tiempo aprendí, o mejor dicho experimenté, el instante más real y
verdadero que he vivido hasta la fecha. ¡ Un regalo para recordar
siempre !.
En este tiempo aprendí que mi debilidad se ha
convertido en mi fortaleza y que aquello que me "perdía" me ha salvado
para redescubrirme la vida.
En este tiempo aprendí que si no puedo ser feliz ahora con lo que tengo, tampoco lo seré mañana.
En este tiempo aprendí que el mejor momento para ser feliz es éste, porque la vida es ahora.
GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS
