Comparto mi reflexión sobre este aspecto que es un “escollo” muy frecuente por el que las mujeres pasamos. Aunque pienso que el mensaje de “ no tengo tiempo “ lo dan tanto hombres como mujeres así que puede ser utilizada la reflexión indistintamente para ambos. Claro que la lectura que podemos hacer quizás varíe de si se es un hombre o una mujer.
Quizás muchas personas no estén de acuerdo, pero puede que le sea útil a alguien para salir de su atolladero.
Por regla general, cuando una mujer escucha de su amigo, marido, amante, pareja, ( lo que sea ) que no tiene tiempo, eso significa para ella de entrada, que ella ha dejado de ser prioridad para él.
Suelo decir que las primeras interpretaciones se alejan mucho de la verdad, así que conviene remirar y cuestionar ese juicio porque si no, la liamos !!. Lo cual no significa necesariamente que esta apreciación no pueda ser cierta en algunos casos.
A lo largo de mi vida, siempre he vivido estas situaciones con los distintos hombres que me han “importado”. Motivo por el que cuando recientemente lo he vuelto a experimentar, me conviene y mucho darle una vueltita.
Después de la reacción “colérica” que cada vez es más breve, miro y recuerdo cómo he abordado esta situación en otras ocasiones. Maneras tan variadas como pasar del chico e irme con otro ( hay tantos en el océano … ), echarle la bronca del siglo, o peor aún, seguir ahí esperando a que tenga tiempo para mi mendigando atención y cariño ( no sé qué es peor ).
Es fácil darse cuenta de que todas esas medidas, son desde el exterior y ahí no está el origen ni la clave de todo.
Los demás son tu imagen, reflejada en un espejo;
Tu propio pensamiento que regresa a ti. ( Byron Katie ).
Los que me conocen saben que hablo en voz alta y con cierto “teatro”. Así que escribo literalmente lo que una vocecita me decía:
“ Ay Luz, mira dónde estás enfocada. ¿Te das cuenta de que no te estás dedicando el tiempo que mereces y necesitas a ti misma en los últimos días? Estás dejando de ser tú prioridad para que otra persona o circunstancia lo sea. ¿Lo ves cariño?.
La solución no es que este chico te dedique de nuevo más tiempo como hacía antes, si no que tú te lo dediques a ti como sabes hacerlo y disfrutes de ti misma.
La solución no es que seas la prioridad en la vida de nadie, si no en la tuya “.
Como dirían algunos “Oído cocina” . Así que tomé nota, me dediqué de nuevo a saborear de mi maravillosa compañía, bendecir por supuesto a la persona que me mostró ese mensaje y recolocarme de nuevo en mi centro.
Quizás esta experiencia haya sido como un “examen” para comprobar si he aprendido la lección. Creo que probablemente se producirá en alguna vez más como mínimo para ver que cuando una persona me dice que no tiene tiempo y siento por un instante que no me está prestando atención, en realidad, lo que me está diciendo es que me dedique tiempo a mi misma y vuelva a mi centro porque me estoy saliendo.
Quizás muchas personas no estén de acuerdo, pero puede que le sea útil a alguien para salir de su atolladero.
Por regla general, cuando una mujer escucha de su amigo, marido, amante, pareja, ( lo que sea ) que no tiene tiempo, eso significa para ella de entrada, que ella ha dejado de ser prioridad para él.
Suelo decir que las primeras interpretaciones se alejan mucho de la verdad, así que conviene remirar y cuestionar ese juicio porque si no, la liamos !!. Lo cual no significa necesariamente que esta apreciación no pueda ser cierta en algunos casos.
A lo largo de mi vida, siempre he vivido estas situaciones con los distintos hombres que me han “importado”. Motivo por el que cuando recientemente lo he vuelto a experimentar, me conviene y mucho darle una vueltita.
Después de la reacción “colérica” que cada vez es más breve, miro y recuerdo cómo he abordado esta situación en otras ocasiones. Maneras tan variadas como pasar del chico e irme con otro ( hay tantos en el océano … ), echarle la bronca del siglo, o peor aún, seguir ahí esperando a que tenga tiempo para mi mendigando atención y cariño ( no sé qué es peor ).
Es fácil darse cuenta de que todas esas medidas, son desde el exterior y ahí no está el origen ni la clave de todo.
Los demás son tu imagen, reflejada en un espejo;
Tu propio pensamiento que regresa a ti. ( Byron Katie ).
Los que me conocen saben que hablo en voz alta y con cierto “teatro”. Así que escribo literalmente lo que una vocecita me decía:
“ Ay Luz, mira dónde estás enfocada. ¿Te das cuenta de que no te estás dedicando el tiempo que mereces y necesitas a ti misma en los últimos días? Estás dejando de ser tú prioridad para que otra persona o circunstancia lo sea. ¿Lo ves cariño?.
La solución no es que este chico te dedique de nuevo más tiempo como hacía antes, si no que tú te lo dediques a ti como sabes hacerlo y disfrutes de ti misma.
La solución no es que seas la prioridad en la vida de nadie, si no en la tuya “.
Como dirían algunos “Oído cocina” . Así que tomé nota, me dediqué de nuevo a saborear de mi maravillosa compañía, bendecir por supuesto a la persona que me mostró ese mensaje y recolocarme de nuevo en mi centro.
Quizás esta experiencia haya sido como un “examen” para comprobar si he aprendido la lección. Creo que probablemente se producirá en alguna vez más como mínimo para ver que cuando una persona me dice que no tiene tiempo y siento por un instante que no me está prestando atención, en realidad, lo que me está diciendo es que me dedique tiempo a mi misma y vuelva a mi centro porque me estoy saliendo.
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