No sé qué te habrá evocado el título de esta entrada, quizás de pronto hayas experimentando cierta nostalgia y hasta tristeza por echar un vistazo hacia atrás y ver dónde se quedaron muchos de tus sueños, quizas seas más afotunado/a y hayas reaccionado con alegría repasando en un instante y comprobando que has cumplido mucho de tus anhelos, o peor aún, quizas estés pensando que ni siquiera recuerdas haber tenido sueños porque ya has olvidado lo que es eso de SOÑAR.
Parece que la imaginación es sólo el mejor juguete de los niños, aunque estos incluso ya empiezan a olvidarlo y en lugar de ello eligen juguetes cada vez más completos, así que para los mayores, pararse un poco y soñar quizas es no sólo un artículo de lujo sino una pérdida de tiempo porque "hay que ser realista".
Sin embargo, quizás no nos damos cuenta que pensar en situaciones, cosas, personas... en nuestra cabeza es soñar o imaginar y desgraciadamente los adultos lo aplican mucho más para preocuparse por cosas negativas que no quieren que les suceda que por cosas positivas que desean en sus vidas.
Además, si alguno se atreve a ser idealista y soñar, siempre encuentra bien dentro de su propia cabeza, bien fuera a través de algún familiar, amigo o conocido, el mazo para detener su sueño con alguna frase tipo: eso es imposible, baja a la realidad, estas perdiendo el tiempo, qué cosas se te ocurren, olvídalo, etc.
Yo te animo, primero a que observes cómo en realidad sigues imaginando todo el tiempo numerosas situaciones, cosas, personas que luego terminan sucediendo y fíjate si el contenido es positivo para ti y los que te rodean o si es negativo.
Segundo, te animo a que recuperes de una manera más consciente esa habilidad que nuestra maravillosa mente tiene y que quizás tu puedas tenerla algo atrofiada, pero funciona aún, te lo aseguro.
Sueña y crea con ilusión, con alegría, con esperanza, con Amor lo que quieres que sea tu vida.
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