Los Reyes Magos ... ¿existen?

Me entristece comprobar  cómo muchos niños  ya  no  creen en la Navidad,  ni en Papá  Noel,  ni  en los Reyes Magos.  Con  mucho  realismo  reconocen  que son sus padres  quienes les compran los juguetes.

Algún que otro niño  se acerca a mis hijos para decirles que los Reyes Magos no existen,  que eso son cuentos …

Creo que no vemos  la  profundidad  de  la  Navidad.   

Estas  fiestas  aunque  sean  muy  comerciales  tienen  un  sentido  muy  profundo,  al menos para mi lo tienen.

El  espíritu  de la Navidad   es  el  Amor,  la  Solidaridad  y  recordar  que  Somos  Dioses  Creadores  de   nuestra  propia  Realidad .  Para  ello  necesitamos  Soñar  y  Creer .  
La Navidad marca en cierta forma el camino hacia donde podríamos ir,  diría que el destino hacia el que vamos aunque muchos lo pongan en duda.  La estrella nos guía mostrando el rumbo hacía el Amor y la plenitud del Ser.   Para ello  simbólicamente  se  celebra todos los años  la Navidad,  para ayudarnos a recordar nuestro propósito en este mundo y mantener viva llama.

Cuando  perdemos  la ilusión  nos  volvemos  seres  meramente  humanos  con  cuestiones  meramente  cotidianas.

¿Hemos venido a este mundo  sólo  a  sobrevivir  satisfaciendo nuestras necesidades más básicas y elementales?

Ahora  son  los  Reyes  Magos   pero  cuando somos más grandes  son otras cuestiones  como  aquello que queremos  estudiar,  un viaje que  queremos  realizar,  un  negocio  que anhelamos  crear ….  Siempre habrán  personas  que  no crean ,  que hayan permitido  matar  su ilusión  y  con ello  la  consciencia de su poder creador. Siempre hay personas en nuestro alrededor que nos dicen que nuestro sueño es iluso e infantil y que despertemos al mundo real.

Están  en su derecho pero ante esa situación les propongo a mis hijos que cuando algún amigo le diga que los Reyes Magos no existen  les respondan con alegría cantando:  " Creo en las Navidades ,  creo  en el Amor , como es verdad que Santa hace siempre su labor ….  ".

Esto parece algo inocente pero desde pequeños  les ayuda a ser fieles  a sí mismos. 

El que duda,  peca. ¿Recuerdas ese artículo?  En el camino  muchas  personas  y  situaciones  nos  hacen  dudar  y  ponen en peligro  nuestra  fé,  nuestra  ilusión  y  nuestra  confianza.   Para mi son  retos  y situaciones  formidables para  fortalecer  la  fidelidad  a nuestro corazón y  nuestro guía interior.

Algo que podríamos  hacer  los  adultos es  recuperar la inocencia y la ilusión  de la niñez ,  esa que dejamos olvidada porque  ya  éramos mayores  y  nuestros  asuntos  son  realmente importantes.  

Ilusa  edad  adulta  que  se  cree sabia  y  con  su soberbia  mira  de lejos  la inocencia  del  niño.  Olvida  que  ese niño  y  esa  niña  sigue  viviendo  en su interior  y  cuando  lo  relega  a un rincón  olvidado  empieza  a malvivir,  a buscar  satisfacciones temporales en cosas y  en otras  personas  sin  que ello le llene nunca plenamente.

Por  favor,  regala  ilusión  y  magia  en  la vida  de los menores que tienes  cerca.  

Haz cuando esté  en tu mano por mantener  el espíritu  de la Navidad vivo en sus mentes y en sus corazones.

De paso,  casi  sin darte cuenta,  estarás jugando,  riendo y soñando  a la par con ellos;  y no serás tú,  si no tu niño/a pequeño/a  quien esté  saliendo a pasear y volviendo a brillar  en ti.