miércoles, 3 de septiembre de 2014

Reflexiones con una mujer

Una mujer, se siente muy identificada con una foto reciente publicada donde hago una declaración como con la del matrimonio pero por y para mi misma.
Le encanta eso de ser fiel a si misma, amarse y respetarse, pero... y aquí viene lo mejor,
Luz, ¿ entonces tu ves bien eso de compartir parejas ? es que eso yo como que no, eh?
De nuevo entiendo el razonamiento, y si no que me lo digan a mi que he sido de tener un "harén masculino" para mi solita. Hasta que decidí soltar, entendí que no podía amarme y respetarme a mi misma si no lo hacía en igual medida con los demás. Parece una contradicción pero la "idea de compartir" no proviene del Amor, si no del miedo, que te hace creer que hay alguién que te pertenece, te corresponde, te debe aportar algo exclusivamente a ti, ... todo eso encubre miedo, aunque lo llamemos amor.
Lo mismo que deseas para ti, debes ser capaz de concederlo a los demás, y si tenemos en cuenta que los demás en realidad no existen, que son sólo un reflejo de ti mismo/a, cuanto más te amas y te aceptas, de manera natural amas libremente sin necesidad de controlar, manipular, seducir, conquistar, retener, y todos esos mecanísmos del ego, que parecen muy románticos y hasta comprensibles pero que son falsos.

Creo importante recordar haciendo alusión a una película donde las mujeres eran la clave titulada " La fuente de las mujeres" que en nosotras está la llave para transformar la realidad, nosotras somos creadoras de la vida y damos a luz. De la misma forma, nosotras en la medida en que elijamos amarnos y respetarnos, sin utilizar artimañas "de mujer" para retener a un hombre cubriendo nuestras carencias, contribuiremos a que la sociedad esté más equilibrada y sana.

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